martes, marzo 07, 2006

Eter

¿Qué es el Tiempo? es una gran pregunta que siempre buscamos la respuesta y nunca la hallamos, Stephen Hawking intenta explicar esta gran pregunta en el siguiente texto:

¿ES UNA CORRIENTE QUE FLUYE SIN PARAR Y SE LLEVA NUESTROS SUEÑOS, como dice la canción? ¿ O es como una vía de Ferrocarril?
Quizás tenga bucles y ramificaciones y se pueda seguir avanzando y, aún así, regresar en alguna estación anterior de la línea.
Un autor del siglo XIX, Charles Lamb, escribió: "Nada me produce tanta perplejidad como el tiempo y el espacio. Y sin embrago, nada me parece menos que el tiempo y el espacio, ya que nunca pienso en ellos". La mayoría de nosotros no acostumbramos a preocuparnos por el tiempo y el espacio, sean lo que sean; pero todos nos preguntamos en alguna ocasión qué es el tiempo, cómo comenzó y a dónde nos lleva. Cualquier teoría científica seria, sobre el tiempo o cualquier otro concepto, debería en mi opinión estar basada en la forma más operativa de filosofía de la ciencia: la perspectiva positivista propuesta por karl Popper y otros. Según esta forma de pensar, una teoría científica es un modelo matemático que describe y codifícalas observaciones que realizamos. Una buena teoría describirá un amplio dominio de fenómenos a partir de unos pocos postulados sencillos, y efectuará predicciones definidas que podrán ser sometidas a prueba. Si las predicciones concuerdan con las observaciones, la teoría sobrevive a la prueba, aunque nunca se pueda demostrar que sea correcta. En cambio, si las observaciones difieren de las predicciones, debemos descartar o modificar la teoría. Si adoptamos la perspectiva positivista, como yo hago, no podemos decir que es realmente el tiempo. Todo lo que podemos hacer es describir lo que hemos visto que constituye un excelente modelo matemático del tiempo y decir a que predicciones conduce.
Isaac Newton nos proporcionó el primer modelo matemático para el tiempo y el espacio en sus Principia Mathematica, publicados en 1687. El tiempo y el espacio constituían un fondo sobre el cual se producían los sucesos, pero que no era afectados por ellos. El tiempo estaba separado del espacio y era considerado como una linea recta, o una vía de tren, infinita en ambas direcciones. El propio tiempo era considerado eterno, en el sentido de que siempre había existido y seguirá existiendo siempre. En cambio, mucha gente creía que el universo físico había sido creado más o menos en el estado presente hace tan solo unos pocos miles de años. Ello desconcertaba algunos filósofos, como el pensador alemán immanuel Kant.
En 1915 Eistein propuso un modelo matemático completamente nuevo: la teoría general de la relatividad. La relatividad general combina la dimensión temporal con las tres dimensiones espaciales para formar lo que se llama espacio-tiempo. La teoría incorpora los efectos de la gravedad, afirmando que la distribución de la materia y energía en el universo deforma y distorsiona el espacio-tiempo. En la relatividad general, el tiempo y el espacio no existen independientemente del universo o separadamente el uno del otro. Están definidos por medidas efectuadas dentro del universo, como el numero de vibraciones de un cristal de cuarzo de un reloj o la longitud de una cinta métrica. De esta manera el tiempo tiene un inicio y un final.
El Universo en una Cáscara de Nuéz
Stephen Hawking

2 comentarios :

Gastón dijo...

El tío jokin se mete unos trips bravazos. Pero es bien capo. Curioso elemento el tiempo, Giovanotti.

sandra dijo...

sí, es fascinante pensar en algo que a veces parece tan simple pero tiene mucha complejidad y ver lo que opinan los sabios...